enfermedades animales geriatricos

Al igual que los humanos, nuestras mascotas también envejecen. Forma parte de un proceso fisiológico natural como consecuencia del funcionamiento durante años. Se considera que nuestro perro alcanza la 3ª edad alrededor de los 8 años (en razas grandes) y de los 10 años (en razas pequeñas). Y para el caso de los gatos, sobre los 10 años. Es en esta etapa cuando comienzan a aparecer las enfermedades silenciosas. Se denominan así debido a que los propietarios podemos no percatarnos de su existencia, pues su aparición es en muchos casos sutil y progresiva, afectando tanto a su estado de salud como a su comportamiento.

Hoy en nuestro blog os hablamos de enfermedades silenciosas comunes en animales de compañía de edad avanzada con el fin de poder detectarlas a tiempo. Pues lo importante no es que nuestra mascota envejezca, sino cómo envejece, su estado de salud general y su calidad de vida en esta etapa.

Artrosis

La artrosis se caracteriza por una destrucción progresiva del cartílago que cubre una articulación y por una proliferación ósea anormal en el borde de dichas superficies articulares, los osteofitos (también llamados “picos de loro” cuando están ubicados en la columna vertebral). Las articulaciones afectadas pierden elasticidad, provocan dolor e impiden que el animal se mueva con normalidad.

Esta enfermedad puede afectar a todas las articulaciones del cuerpo, siendo más frecuente en caderas, rodillas, hombros y codos.

Artrosis perro geriatrico

Es muy importante que llegada esta etapa, estemos muy atentos al comportamiento de nuestro animal, pues el primer síntoma no será un quejido o una cojera, sino la reducción de su actividad como consecuencia del dolor articular. 

Otros síntomas que nos pueden alertar de que nuestra mascota puede sufrir artrosis son:

  • Cojera
  • Reticencia a correr, pasear, subir al coche o al sofá.
  • Dificultad para levantarse
  • Gemidos
  • Comportamiento irascible y agresivo al manipularle.

Los gatos, a diferencia de los perros, no expresan su dolor por artrosis a través de gemidos, sino que su comportamiento suele cambiar. Tienden a aislarse y a diminuir su actividad.

A día de hoy no existe un tratamiento curativo para la artrosis, pero sí paliativo. Por tanto es fundamental realizar revisiones periódicas. La sintomatología clínica de animales con artrosis se puede tratar con condroprotectores y ácidos grasos. Se recomienda también bajar de peso en caso de animales obesos, realizar ejercicio diario de forma controlada y en aquellos casos de dolor agudo la administración de antinflamatorios, siempre bajo prescripción de nuestro veterinario.

Perdida de visión y audición

enfermedades gatos geriátricos

A medida que nuestros compañeros de cuatro patas van envejeciendo es habitual que aparezca la pérdida de visión y de audición.

En cuanto al desarrollo de la sordera, cuando esta se produce por una otitis o infección sí es posible observar ciertos síntomas frecuentes como sacudidas de la cabeza o muestras de dolor. Sin embargo, cuando la perdida de audición es progresiva y es consecuencia natural de la vejez de nuestro animal, se hace muy difícil de evidenciar y puede en un principio no llamarnos la atención.

Podremos observar ciertos cambios de comportamiento que nos alerten de la pérdida auditiva de nuestra mascota como ignorar llamadas u órdenes, no salir a saludarnos al llegar a casa así como también es probable que duerma un mayor número de horas y que no se despierte con los primeros ruidos de la mañana.

Al igual que la pérdida de audición, la ceguera o pérdida de visión progresiva al llegar a la 3ª edad es difícil de detectar ya que que aparece lentamente y el animal se va habituando a su nuevo estado. Dentro de casa, nuestro perro o gato se orienta y guía gracias a su memoria. Si bien, algunos signos característicos que nos pueden indicar que nuestro animal está perdiendo visión son:

  • Tropieza con personas u objetos.
  • Camina de forma confundida
  • Se desorienta al cambiar muebles en casa o en lugares que desconoce.
  • El animal se maneja peor en ambientes oscuros o con falta de luz.
  • Comportamiento temeroso y desconfiado

Entre las causas de ceguera propias de la edad avanzada de nuestra mascota encontramos la atrofia progresiva de la retina, diabetes, lesiones retinales, corneales o las cataratas. Pueden afectar a ambos ojos a la vez, y cuando son visibles para los propietarios es porque pueden llevar mucho tiempo, incluso un par de años, desarrollándose.

pérdida de visión perros

Cambios de comportamiento

Una de las etapas en las que más cambios de conducta se producen es la senior como consecuencia del declive natural en las capacidades sensoriales y cognitivas del animal así como al desarrollo de enfermedades y síntomas que pueden afectar a dicha conducta.

Como ya hemos mencionado anteriormente, un perro o gato que padece artrosis puede volverse agresivo al contacto físico. Igualmente, como consecuencia de la disminución de sus capacidades sensoriales y mentales se puede producir una menor relación con su entorno, cambio en la relación con las personas, pérdida de conductas aprendidas, pérdida de los hábitos de higiene (pipi y caca), desorientación, nerviosismo, etc.

Sin embargo, aunque el envejecimiento es algo natural, podemos mejorar la calidad de vida y el estado de nuestra mascota:

  • Manteniendo sus rutinas (regularidad en los paseos, comida, horarios, etc.).
  • Estimulación y enriquecimiento de su ambiente a través del juego, nuevas prácticas y premios.
  • Prestándoles especial atención ante cambios en casa (una mudanza, la llegada de un bebé, etc.).

 

En definitiva, como señalábamos al comienzo de esta publicación, lo importante es cómo envejecen nuestras mascotas y su calidad de vida cuando llegan a la edad senior. Por tanto, desde la Clínica Veterinaria Albacora recordamos la importancia de realizar un chequeo veterinario de forma periódica al cumplir los 8 – 10 años de edad.