La Navidad es, probablemente, una de las épocas del año en la que más adopciones de mascotas se producen. La simple idea de la llegada de un nuevo miembro a la familia o el hecho de recibir el cariño y compañía de un animal nos llena de ilusión. Enseguida pensamos en ponerle un nombre, en buscarle un camita para descansar, una jaula de su tamaño o una correa para pasear con él. Pero la realidad es que acoger o adoptar una animal supone también ciertas responsabilidades y consideraciones en las que no siempre caemos.
Hoy queremos recordar los aspectos más importantes que debemos tener en cuenta y valorar cuando decidimos adoptar una mascota:
- Cuando decidimos acoger en casa a un animal estamos adoptando un compromiso con él. Nos comprometemos a cuidarlo el resto de su vida. Por tanto, debemos sopesarlo muy bien y siempre estando de acuerdo toda la familia.
- Un perro suele vivir una media de 13 – 15 años, mientras que un gato puede alcanzar perfectamente los 18 años de vida. En el caso de animales exóticos dependerá de cada especie: por ejemplo, un ave agapornis o un conejo pueden vivir entre 8 – 9 años.
- Si deseamos adoptar un perro, debemos tener en cuenta su raza a la hora de valorar cuánto crecerán, el carácter o las necesidades de cada animal. Si vivo en un piso, mejor adoptar un perro de raza pequeña o mediana. Por otro lado, si dispongo de poco tiempo para pasear, adoptar un galgo o un labrador puede que no sea la mejor opción por la cantidad de actividad diaria que necesitan.
- Somos responsables de su vida y bienestar. Desde el momento en que llega a casa, nuestra mascota dependerá de nosotros para casi todo: para alimentarse, para salir a la calle a diario varias veces, en el caso de que enferme necesitará que le llevemos al veterinario así como para mantener, en general, una aceptable calidad de vida.
- Lamentablemente, mantener un animal cuesta dinero. Nos referimos no solo a gastos derivados de su alimentación o de las posibles vacunas periódicas, sino también a gastos imprevistos como consecuencia de una enfermedad o un accidente (cirugías, medicación, tratamientos, hospitalización, etc.)
- Nuestro animal, casi con toda probabilidad, enfermará varias veces a lo largo de su vida. Además de los posibles tratamientos y atenciones veterinarias, en estas situaciones nuestra mascota también necesitará cuidados especiales y mayor atención por nuestra parte.
- A la hora de las vacaciones y viajes, es uno más de la familia a tener en cuenta.
- Igualmente, debemos considerar el tamaño y capacidad de nuestro coche para transportar a nuestra mascota con seguridad y en óptimas condiciones.
- El primer año de convivencia es algo más complicado. Hasta el momento en el que aprendan normas y hábitos, perros y gatos suelen hacer alguna pequeña trastada como romper objetos, arañar las cortinas o hacer pipí y caca en casa . La paciencia es fundamental en esta etapa educativa.
- Lo más importante de todo, adoptar un animal requiere por nuestra parte de grandes dosis de cariño, simpatía, ganas de disfrutar y compartir momentos únicos, de estar dispuesto a recibir el amor más incondicional y la más fiel de las compañías.
En definitiva, ganas de vivir una emocionante aventura y de enriquecer nuestra vida a diario.